El sector gastronómico fue, sin dudas, uno de los más afectados por los súbitos cambios que produjo la pandemia de COVID-19 y las medidas de aislamiento social.
Tal es así, que este bar de dos plantas ubicado en San Luis al 2000 pasó a tener apenas el 20 % de su volumen habitual de ventas, ya que solo puede hacer delivery de comida y cafetería.
Para hacerle frente a la crisis, su propietario decidió convertirlo, además, en una verdulería, para la que aprovechó el mobiliario temporalmente en desuso y puso al servicio toda su experiencia en la manipulación de alimentos.
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