Se trata de cuatro hermanitos y un primo de ellos, de entre uno y ocho años de edad, que a raíz de la denuncia de una vecina fueron encontrados por la policía en una vivienda de Cullen al 1300. Allí, habían quedado al cuidado de un adolescente de 16 años que al arribo de los efectivos estaba duermiendo.
Los menores fueron llevados al Hospital de Niños Zona Norte, donde recibieron la atención médica necesaria. Los pequeños estaban en estado de suciedad extrema y manifestaban tener hambre, pero no se les detectó problemas de salud importantes.
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