Los repartidores de comida en moto y bicicleta reclaman por seguridad, luego de que se produjeran varios robos en el marco de su tarea de “delivery”. Por cierto, en las últimas semanas vienen padeciendo la inseguridad como pocos, ya que le ponen el cuerpo y recorren las calles todo el día.
Según diversos testimonios, lamentan que la situación sea complicada y confirman que hasta tienen grupos de alerta para advertir diferentes problemas.
Respecto a las zonas más complicadas, parece que las zonas de Pellegrini y los shoppings pican en punta. Algunos tienen sus estrategias y, quienes pueden, eligen trabajar de día, porque la noche es más peligrosa.
En definitiva, los trabajadores lamentan que la empresa no discrimine entre los vehículos de que disponen porque a veces, los ciclistas quedan muy expuestos. Así, los trabajadores han hecho reiterados reclamos pero por el momento no han sido escuchados.
Esperan más controles para que la "situación mejore" y que "la seguridad sea la necesaria para poder trabajar tranquilos". Mientras tanto, mañana se manifestaran y harán un paro para sumar estos pedidos al de una mejora en el valor de la tarifa.
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