El inusual caso se remonta a 2020 cuando un hombre de 39 años murió en un accidente de tránsito y, como la viuda estaba de viaje, quien se encargó de todos los trá fue la amante.
La victima del siniestro vial y su esposa, residentes en Turín (Italia), tenían un hijo pequeño juntos. Pero además él estaba una relación extramatrimonial que no escondía.
Tiempo después, al desarrollarse la demanda indemnizatoria por el accidente, la amante también se presentó a los tribunales para reclamar sus derechos.
Según explicó al diario La Stampa su abogado Me Gino Arnone, la amante "estaba vinculada al hombre por una esperanza de vida común. Había una intensidad real en los sentimientos, convivían".
"Pasaba tres días conmigo y cuatro con la familia", afirmó la amante a ese medio.
Lo cierto es que su demanda prosperó y el seguro aceptó indemnizarla, aunque no trascendió el monto.
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